No amo a mis amigos ni con el corazón ni con la mente. Por si el corazón dejara de latir, o mi mente me fallara y te pudiera olvidar. Los amo con el alma. El alma no deja de ser, tampoco olvida. Rumi. ¿No os parece precioso?...
Es cierto que transitamos en individualidad, que hacemos el
recorrido de la vida cada uno, pero también tengo que decir que no estamos
solos, que podemos ir de la mano, fortalecernos juntos y, aunque está claro que
cada uno tiene que seguir los dictados de su corazón y su propio camino,
siempre habrá alguien que nos ayudará a superar un bache, siempre encontraremos
una mano amiga y también personas que nos den buenos consejos, e inclusive que
sufran contigo, compañeros, amigos, hermanos, que estarán en los momentos
difíciles.
Aunque bien sabes, que siempre tendrás que ser tú el que tenga que enfrentarse a la realidad del
momento y dar el salto.
En eso consiste el despertar
de la conciencia, en eso estamos ahora, en ese despertar y, no estamos
solos, nuca lo hemos estado, así que confía, porque tu maestro interno te habla
constantemente, te indica, ¡escúchalo!
©LUHEMA.
Reflexión del día 5 de juliode 2012
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