No amo a mis amigos ni con el corazón ni con la mente. Por si el corazón dejara de latir, o mi mente me fallara y te pudiera olvidar. Los amo con el alma. El alma no deja de ser, tampoco olvida. Rumi. ¿No os parece precioso?...
Nunca puedes liberarte del dolor cuando éste raspa tus
vestiduras, es una emoción que únicamente se alivia con las lágrimas, con los
suspiros, con la flexibilidad emocional, con la oración, con el silencio, con la
contemplación de la realidad, con el amor y cariño…
Hay un dicho que dice así: Deja que la tormenta te doblegue
a su voluntad.
Y es que no podemos resistirnos a lo que se siente, debemos dejar que nos muestre
su cara amarga, por dolorosa que ésta sea, porque de este modo
comenzaremos a sanar a el mismo sufrimiento.
Cuando hay un gran dolor
hay algunas premisas que no debemos dejar de lado para superarlo, estas
son; No sentir nunca lástima de ti mismo. No apartar el dolor, no intentar comprenderlo y por supuesto no
recrearse en él.
©Luhema
Excelente música.
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