No amo a mis amigos ni con el corazón ni con la mente. Por si el corazón dejara de latir, o mi mente me fallara y te pudiera olvidar. Los amo con el alma. El alma no deja de ser, tampoco olvida. Rumi. ¿No os parece precioso?...
PREGÚNTATE .
Preguntas para hacerse si verdaderamente necesitas salir de
la apatía, de la inmovilidad, de las relaciones tóxicas y de todo aquello que inconscientemente
sale a tu encuentro y que no reconoces como oportunidad para el cambio.
La primera pregunta a
responder sinceramente sería esta;
¿Cómo me siento?...
¿Cuáles son las cadenas, esas cargas o problemas
aparentemente insolubles a los que hay que adaptarse?....¿He vendido mi alma a algún tipo de compromiso? Y, ¿qué
puedo hacer para salir de ahí?¿Qué debería hacer, que todavía no he hecho?¿Qué cosas suprimiría de mi vida?
Sólo el ejercicio de
responder estas cuestiones desde la sinceridad ya abre la puerta de la sanación
interna y de la acción, ya que cuando se reconoce aquello que no vibra en tu
alma atiendes a tu verdad, haces sitio
para sentir y prestas atención a cómo te sientes, a lo que sucede a tu
alrededor, clarificas los obstáculos y das el paso para disminuir tu resistencia y que el sufrimiento comience a desaparecer. En
definitiva, regresas al corazón, así que imagínate que poderoso es este
ejercicio de sinceridad contigo mismo. Sin saberlo estás accediendo a tu
Akasico para reconocer , responder , cambiar y sanar.
©Luhema
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