No amo a mis amigos ni con el corazón ni con la mente. Por si el corazón dejara de latir, o mi mente me fallara y te pudiera olvidar. Los amo con el alma. El alma no deja de ser, tampoco olvida. Rumi. ¿No os parece precioso?...
Una vuelta más.
¿Y por qué una vuelta más, te preguntarás? Claro, no te dije que este artículo nació porque terminó un año y comenzamos uno nuevo. Le dimos…, bueno, el planeta Tierra le dio otra vuelta a nuestro Sol. Y eso siempre es significativo, aunque no nuevo, porque la naturaleza y todos lo sabemos, es cíclica. Pero esto no significa que es monótonamente repetitiva, pues cada momento es distinto del anterior, y eso, lo sabes.
Terminamos de despedir un año que para muchos habrá tenido momentos buenos y para otros no lo habrán sido tanto, pero lo cierto es que lo hemos experimentado todo por todos los poros de la piel, y eso nos hace sentir que la vida está activa. El trascurso de los días nos ha aportado todo un acopio de experiencias que hemos vivido. Ahora estamos comenzando un nuevo año, una nueva aventura, unas nuevas ilusiones, un viaje nuevo por el que tendremos que pasar, afortunadamente, porque parece ser que cuando comienza un año todas nuestras ilusiones recobran fortaleza, nos proponemos muchas cosas, las que haremos, las que dejaremos de hacer…, pero tengo que decirte o deciros que no dejamos de ser, de seguir con nuestro particular viaje, con nuestro girar y girar , porque como decía la canción…, “gira el mundo, gira, en el espacio infinito con amores que comienzan con amores que se han ido con las penas y alegrías de la gente como yo”
Y bueno, ya hemos completado una vuelta más alrededor del Sol, hemos girado y girado, avanzando por el espacio, por el tiempo, y nosotros a su vez también lo hemos hecho en torno a nuestro Sol central…, el que mora dentro de nosotros.
Si algo aprendí con una experiencia mística que tuve con los derviches danzantes, fue reconocer que el viaje no cesa jamás, el giro nos hace entrar en relación con la fuerza que mueve todo en el universo. Todo está girando. Giran los átomos, como también giran los planetas, los soles, las estrellas, las galaxias y la fuerza que les hace girar es el Amor. El Amor es la fuerza integradora que nos devuelve a la Unidad. Amor y Unidad son algunos de los atributos que solamente pertenecen a la Divinidad, y nosotros pertenecemos a ella.
Y es curioso, pero el giro siempre ha sido el método activo más eficaz para vislumbrar esos tesoros ocultos en nuestro interior, y quizá también es cuando surgen la eternas preguntas; “¿Cuál es mi propósito en la vida? ¿Por qué estoy aquí? ¿Formo parte de la unidad? Etc…”
Para muchos comienza su nuevo año, su nuevo giro, el primer día del año, pero para otros sin embargo es el mismo día de su aniversario, o quizá comience a contar el día que salieron de “una buena”, de un suceso que les marcó un antes y un después. Pero lo cierto es que de alguna manera seguimos avanzando para completar nuestro giro, y este puede que termine el día que nos marchemos de este lugar, o no. Mientras tanto ahora estamos celebrando que comienza una nueva fase en la que podemos apoyarnos y alimentar nuestras ilusiones para ir en busca de nuestros sueños, tenemos la oportunidad de comenzar a escribir este nuevo libro en blanco que se abre precisamente ahora. No sabemos qué ocurrirá durante este año, pero tenemos que tener presente que somos nosotros los protagonistas que decidiremos cómo será nuestro girar.
Quiero expresarte un sentir, y es que todo conspira en ese giro para que puedas iniciar ese viaje hacia adentro y, hoy mismo si así lo quieres puedes unirte a ese comienzo de giro para encontrar la joya que hay en tu interior, que está hecha de más pura belleza que jamás pudieras imaginar. Parte hacia allí. Gira, vacíate…, para poder sentirte lleno.
En realidad la vida, los giros están unidos a la propia experiencia del corazón y las palabras no pueden abarcarlo todo.
Nada mejor que estos versos de Rumi para comprenderlo:
¡Oh día!. Levántate, los átomos danzan,
las almas gozosas, sin cabezas ni pies, danzan.
A aquél para quién el firmamento y la atmósfera danzan,
al oído le susurraré adonde conduce la danza.
Este es mi comienzo de año de, los cuadernillos de viajes de Luhema. Viaja- gira.
© Begoña Beneito Luhema.
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