No amo a mis amigos ni con el corazón ni con la mente. Por si el corazón dejara de latir, o mi mente me fallara y te pudiera olvidar. Los amo con el alma. El alma no deja de ser, tampoco olvida. Rumi. ¿No os parece precioso?...
Me gusta caminar con la intuición bien cogida de la mano porque cada vez que he delegado una decisión a mi parte más racional, he terminado perdiendo energías, enfadándome, no sabiendo aceptar las controversias, encontrándome con personas y situaciones en las que el fin era el de la manipulación. Aunque también tengo que decir, que he aprendido mucho de cómo es y funciona el juego de la mente desunida del corazón.
Confiar en la intuición es abrir la puerta a la abundancia del universo,
es encontrar el centro de nuestro poder, utilizar la frecuencia que nos conecta con nosotros,
conocer el juego del espíritu, y las claves que hay para pasar por la vida de manera flexible.
Sin embargo, cuando he escuchado la voz de mi intuición, la voz entregada de mi espíritu, he recibido el doble de regalos, porque no importa lo que vivas, lo que ocurra, no importa nada porque tu ser es flexible, acepta, integra, es espontáneo, todo sucede en el momento oportuno de la manera más sencilla, aparece el milagro de la sincronicidad, y es que dándole paso a la intuición, estás siendo guiado por el camino más apropiado para ti en el momento del ahora.
© Luhema
La intuición del segundo rayo, es amor y sabiduría la comprensión de dios.
Emilio fiel , Miyo
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