Pequeños detalles .
Si os dijese que este vestido es de un afamado diseñador de
alta costura, seguro que podríais creerlo. Pero no, no lo es. Este espectacular
y sensual vestido, con red de cuentas cilíndricas y collar amplio es de la
época del faraón Keops, y apareció en Giza, concretamente en la tumba G7440Z.
Yo me imagino a una
mujer caminando de forma muy sinuosa y envolviéndola el sonido de las cuentas
de su vestido perfumada con esencia de loto.
La moda en el antiguo Egipto es más que tendencia, es tradición, aun así, los antiguos egipcios; príncipes, escribas, sacerdotes y todos los que pudieran costeárselo, rendían culto a la belleza, de hecho, se adornaban con joyas, pelucas, tocados y perfumes de los más exquisitos.
En esta foto podemos
ver a una mujer, una portadora de ofrendas para la eternidad de 2.000 años a.C,
ricamente ataviada con «un vestido similar al expuesto» en la primera fotografía, con brazaletes en
tobillos y muñecas y, si os fijáis, tiene las uñas de los pies con esmalte, las
axilas bien depiladas y por supuesto, muy bien maquillada. Lleva en su mano
derecha agarrado por las alas a un pato vivo y en equilibrio sobre su cabeza
una cesta con alimentos. También es de destacar,
la intensidad de su mirada, que por lo menos a mí, me remonta a aquellos
tiempos.
Esta escultura es bellísima, estuve contemplando todos sus
detalles largo tiempo, hay figuras que al estar frente a ellas te hablan, te
cuentan una historia, y es que Egipto tiene Heka, tiene magia que todavía
perdura.
Y como nota, he de decir que la presencia de estas estatuas,
portadoras de ofrendas en las tumbas, garantizaba el abastecimiento del difunto
para siempre.
© Luhema
Hermoso relato y que bello vestido y accesorios !
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